La toma del yacimiento, situado a 65
kilómetros de la ciudad Comodoro Rivadavia (Chubut) comenzó con la
movilización de 400 trabajadores que, con el correr de las horas
llegaron al millar, demandando la reincorporación de unos 40
trabajadores despedidos, aumento salarial, encuadramiento bajo el
convenio petrolero y la eliminación del descuento por impuesto a las
ganancias.
La medida fue acompañada por la
movilización de las “Mujeres de los Dragones” que, en medio de la nieve y
lluvia cortaron las rutas 3 y 26 reclamando la solución del conflicto.
La audaz, decidida y violenta acción
obrera hizo paralizar la respiración de la burguesía que, por un lado,
vio peligrar el suministro de energía a gran parte de sus empresas, y
por otro, más allá de las pérdidas millonarias de la multinacional, le
hizo correr frío por la espalda frente a la posibilidad del “contagio”
de los trabajadores de la provincia, la región y el país quienes se
encuentran en estado de creciente decisión de lucha y movilización que
ya la ha puesto contra la pared.
Su primer reflejo, bien reaccionario,
bien de clase, fue saturar la región con gendarmería y prefectura y el
desembarco de la Gestapo de los monopolios encabezada por el Coronel
Sergio Berni -Secretario de Seguridad- segundo de Nilda Garre- el mismo
que desde la planta de YPF de La Matanza en medio del paro de
camioneros, amenazó con movilizar al ejército, con el claro propósito de
hacer sonar el escarmiento en los petroleros, a toda la clase obrera y
al pueblo.
Lejos de amedrentar a los obreros en la
toma, sólo lograron reafirmar su decisión tras lo cual comenzaron a
acumular suministros y alimentos para una larga toma hasta lograr su
objetivo: que se atiendan sus reclamos.
Y el conflicto así logró tener trascendencia nacional tomando estado público en todo el país.
Aterrada y acorralada la burguesía por
la toma, a días de la importante movilización obrera y popular contra el
impuesto a las ganancias del próximo miércoles, se vio obligada a
sacarse el uniforme de combate y ponerse el de demócrata y apelando al
discurso del “diálogo”. Para ello movilizó a los gobernadores de las
provincias vecinas e intendentes de varias localidades, además de las
autoridades nacionales.
La toma concluye cuando el Coronel
Sergio Berni, el gerente de PAE y Martín Buzzi (gobernador de
Chubut), en conferencia de prensa, declaran: “hay un acuerdo, los
ocupantes dejaron las instalaciones de Cerro Dragón y mañana (por hoy)
van a sentarse a conversar los trabajadores y Pan American Energy
(PAE)”.
Este conflicto, por sus características y
metodología, sitúa en un nuevo peldaño a la lucha de clases
convirtiéndose en un nuevo hito y referencia para todos los trabajadores
y el pueblo. La lucha continúa…
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