Más
allá de las maniobras de silenciamiento, con las que la burguesía
pretende esconder el incendio político en el que está sumergida, ya se
sabe que no se puede tapar el sol con la mano. El sur de nuestro país, y en particular las provincias de Santa Cruz y Chubut,
es escenario de profundas confrontaciones, que por un lado, dejan al
desnudo los intereses concretos del gobierno de los monopolios, y por el
otro, se constituyen en el piso del nivel en el que se encuentra hoy la
lucha de clases. En el conflicto de los trabajadores petroleros de
Cerro Dragón (encuadrados en la construcción) la moneda está en el aire y se profundizan los reclamos.
Por otra parte, los trabajadores de la minera Triton,
cercana a Gdor. Gregores, realizan un paro de la actividad por mala
liquidación de haberes; reclamando además por las condiciones de
trabajo, la habitabilidad, la comida y la falta de elementos necesarios para realizar tareas en la meseta, donde en este momento las temperaturas llegan 15ºC bajo cero. Denuncian: “Estamos
en condiciones de vida deplorables, esto lo veníamos advirtiendo hace
tiempo, pero como siempre la empresa no hace nada. Solo les interesa
producir y no importa a qué costo para el personal. Hoy decidimos
pararle toda la producción a Triton, hasta que no nos den respuesta a
todos los reclamos que tenemos pendientes”. “Vivimos en módulos que están hechos pelota”, refiriéndose a los trailers y containers en los que el personal se aloja. “Goteras,
frío y humedad es lo menos que tienen estos módulos que cuando se les
acumula la nieve en el techo, empiezan a escurrir el agua para adentro”. Más adelante indicaron que “no
tenemos calefacción y acá hace días de -15ºC, la comida no es lo mejor,
el agua es más escasa que el oro, que lo sacamos nosotros todos los
días”… Con estas “premisas”, sumadas a las condiciones de seguridad
deficientes se maneja no sólo Triton, sino todos los yacimientos de la
provincia.
En este mismo marco de convulsión y avance de las luchas obreras y populares, continúa profundizándose el conflicto. En Caleta Olivia, centenares de trabajadores de la construcción, manifestaron su furia tras quedar suspendidos por falta de fondos que no habría enviado Nación para dar continuidad a la edificación de un plan de 40 viviendas.
Desataron su bronca tomando la sede gremial de la UOCRA,
donde prendieron fuego una camioneta que se hallaba estacionada en el
patio interno y luego quisieron linchar al secretario general del gremio
que tiene jurisdicción en toda la zona norte de Santa Cruz, Américo
Palma. Por otro lado, en Pico Truncado, un importante grupo de trabajadores también de la construcción tomó el martes pasado las instalaciones de la seccional
Pico Truncado, reclamando directamente a los principales dirigentes
gremiales de orden regional y nacional. La medida expresa su fundamento
en que “las personas y compañeros de la localidad se encuentran
disconformes y en total desamparo sindical; no sólo los que están
trabajando, sino también los desocupados”.
La burguesía como clase está muy débil, y el principal motivo de ello es el avance de la lucha obrera y popular;
porque sus “respuestas”, tanto en lo económico como en lo político,
siempre estarán enfrentadas a los intereses de la clase obrera y las
masas populares.
Es tarea hoy de los revolucionarios profundizar la batalla en el terreno político, ahondando esa debilidad.
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