Que
el capitalismo se encuentra en una crisis política de carácter
irreversible, ya no sorprende a nadie, y menos aún cuando dan pasos en
ese sentido que aparecen como espectaculares y sorprendentes, y ni nos
podemos imaginar los que van a aparecer.
El
hecho más reciente así lo demuestra: el paso que acaba de dar la
Iglesia católica con el nombramiento del Papa Francisco, y de la mano de
él, el desparpajo, populismo y desenfado con que se expresa, que hasta
se atrevió a plantear que los jóvenes hagan lío, en un contexto donde el
planeta, producto de la lucha de los pueblos, se está prendiendo fuego,
así parecen afirmarlo.
Pero
esto no podía ser menor en el afán de intentar hacer una barricada para
frenar o desviar el avance y ansias de los pueblos que cambiar esta
vida indigna. Es por ello que tratan de tomar un atajo (llegaron tarde) y
erigirse en apóstoles de una rebeldía que es producto, precisamente,
del desprestigio que cada vez más se profundiza en las instituciones del
sistema dominante, que también abarca a la Iglesia.
De
ahí toda esta serie de respuestas de carácter populista que,
contradictoriamente, benefician y alientan la lucha de los pueblos, y
por ello es una crisis insalvable para la burguesía. Por ejemplo, cómo
desdecirse del “hagan lío”; o dicho de otra manera, cómo lavo, ya no mis
manos, sino la cara de la Iglesia si no les planteo lo básico: rebélense.
Pero la gravedad de la crisis es que no pueden resolver nada en
beneficio de los pueblos; por el contrario, porque el afán de la
ganancia, la explotación del hombre y la concentración económica es
inherente a su existencia, por lo tanto, graves problemas tienen: “hacé lío, rebelate, pero tengo que seguir chupándote la sangre”.
Vivimos
en la era del capitalismo monopolista de Estado, y la Iglesia no puede
estar por fuera de ello, para lo cual necesariamente también tienen que
pegar un viraje en el timón. Por ello, para los sectores más
concentrados del capital a nivel mundial, el nacimiento del nuevo Papa
Francisco, como diría el proverbio popular, viene con un pan debajo del
brazo para un sector hegemónico de la oligarquía financiera a nivel
mundial y poder avanzar así, de la mano del Banco del Vaticano
(principal accionista del Banco Ambrosiano), en el total control del
Banco Ambrosiano, que al parecer es el bocado predilecto de otros
sectores imperialistas como el Banco Mundial entre otros, que en el
marco de la puja interimperialista, de la mano de la política, se
dispone a entrar (y aparentemente con éxito) en los laberintos
palaciegos del Vaticano que desde los comienzos de la guerra fría
recibió de las potencias más importantes, como Estados Unidos, Alemania,
Francia, Italia, multimillonarios aportes que ingresaron en la Iglesia
para la lucha anticomunista.
De
la mano de las contribuciones vino el lavado de dinero, la timba
financiera, y un descontrol de una fabulosa masa de plusvalía, que dado
el grado de poder planetario alcanzado por la oligarquía financiera, ya
estaban en “manos equivocadas”.
La
ingeniería se puso en marcha. Así parecen expresarlo claramente algunos
hechos. Por ejemplo, Monseñor Ettohe Balestrero, Subsecretario para las
relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado del Vaticano,
presentó los resultados positivos en la prueba clave de transparencia
financiera del Vaticano efectuada por MONEYVAL, comité de expertos del
consejo de Europa para la evaluación de las medidas para “combatir” el
lavado de dinero y la financiación del terrorismo. El mismísimo Monseñor
afirmó: “Queremos construir un edificio que demuestre la voluntad
de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano de ser un
compañero fiable en la comunidad internacional”. Es bueno aclarar
que MONEYVAL, años atrás le había bajado el pulgar con graves
acusaciones al Banco del Vaticano por lavado de dinero.
El
segundo paso de la ingeniería lo acaba de dar el Papa Francisco al
crear una comisión compuesta por 8 miembros con poderes
plenipotenciarios para reformar la estructura económica-administrativa
del Vaticano con el objetivo, dicen “de la simplificación y la
racionalización de los organismos existentes y una más cuidadosa
administración de la Santa Sede, con el fin de elaborar soluciones
estratégicas de mejoras necesarias para evitar el despendio de recursos
económicos, promoviendo la transparencia en bienes y servicios,
perfeccionar la administración del patrimonio mueble e inmueble, para
operar cada vez con mayor prudencia en el sector financiero”. Está
bueno aclarar que de los 8 miembros sólo 2 pertenecen a la curia, los
otros 6 a países de Francia, Alemania, Italia y Singapur. Este último
miembro llamado George Yeo, ex Ministro de Asuntos Exteriores de Singapur y Vicepresidente de Kerry Group Limited, estudió ingeniería en la Universidad de Cambridge con una beca presidencial, y en 1976 se graduó con la máxima calificación en dos disciplinas y se convirtió en Oficial de transmisiones de las Fuerzas Armadas de Singapur. Después de licenciarse en el Singapore Command and Staff College en 1979, fue destinado a las Fuerzas Aéreas de la República de Singapur. Obtuvo un máster en gestión de empresas (con la máxima distinción, la Baker Scholar) de la Harvard Business School en 1985. Fue nombrado Jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Aéreas (1985-1986) y Director de Operaciones Conjuntas y Planificación del Ministerio de Defensa (1986-1988), alcanzando el grado de General de Brigada.
Todo
parece indicar que la política del doble discurso para poder llevar
adelante las medidas económicas que se aplican en América Latina, lo
está utilizando de receta las nuevas políticas de la Iglesia.
Estas equivocado en el enfoque: el problema no es economico ni de Estado.
ResponderEliminarEs un problema global de acoso, derribo y muerte de TODA la Humanidad (menos los humanos que quieren dejar como esclavos). La etiología del proceso es espiritual: Lucifer, y material: Satanás y todas las razas de Orión y demás reptiloides.
Si no entiendes esto, no entiendes nada.
Y los humanos, comprados por el dinero (¡que No existe!) por el que babean hasta dejarse matar...y matando cuendo pueden (no importa la guerra si las bombas caen al vecino. Ni asesinar a los propios hijos abortando).
La muerte atrae muerte