Volvió,
por supuesto, es una forma de decir, porque como lo estamos viviendo en
innumerables lugares de nuestro territorio, los conflictos nunca “se
van”, en todo caso atraviesan por diferentes estadios que tienen que ver
con la confrontación de clases y en todo caso, con el avance de la lucha.
El nivel creciente de confrontación que
atraviesa todo nuestro país, con el eje en los trabajadores y la
población asalariada, ha vuelto a instalarse en Gral. Mosconi, uno de
los íconos que marcaron toda una época de quiebre con la
institucionalidad burguesa, allá por los años 90.
En diciembre pasado, antes de que terminara el año, trabajadores municipales en huelga tomaron el edificio municipal de Mosconi, sitiaron
prácticamente la plaza central y cortaron las principales calles del
pueblo. Reclamaban la inmediata derogación de la ordenanza que decretaba
la emergencia económica para recortar sueldos y haberes del personal municipal, decisión
“aprobada” por el Concejo Deliberante. (Cabe recordar que las oficinas
del municipio funcionan en el SUPE, porque el edificio original fue
quemado dos veces).
Pese al compromiso del Gobierno,
al 14 de este mes, los trabajadores aún no habían cobrado los haberes
del mes de diciembre y los adicionales correspondientes. Así es que
ocuparon nuevamente el canchón y la sede municipal.
ocuparon nuevamente el canchón y la sede municipal.
Ayer, cortaron la ruta nacional Nº34. Más
de 200 personas, entre obreros municipales, vecinos y miembros de
cooperativas de la ciudad se concentraron en reclamo del pago del sueldo
de diciembre y de otras necesidades que atañen al quehacer cotidiano
del pueblo. El corte se realiza a la altura de Tres Cruces, en el acceso
sur de Mosconi.
Para poder hacerlo y debido al denso
clima que se vive durante estos días de conflicto, tuvieron que utilizar
estrategia para despistar a la policía. En la mañana de ayer, unos 100
obreros “amenazaron” con tomar el Concejo Deliberante que
funciona en Campamento Vespucio. Hacia allí partió un grupo, seguido de
cerca por personal policial. Pero todo era una estrategia de
distracción: cuando los uniformados se desplazaron a Vespucio, una
veintena de obreros ingresaron al canchón municipal, tomaron seis
máquinas de gran porte y las atravesaron en la ruta, cortándola de una.
El Ejecutivo provincial anticipó que hoy
les abonaría lo adeudado pero los manifestantes se mostraron reticentes
e incrédulos ante este nuevo compromiso oficial, y decidieron continuar con el corte total de la ruta hasta que la plata aparezca.
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